rock es para muchos ese género musical que canaliza energía, con el que saltas hasta no sentir las piernas, con el que, en cada concierto, gritas hasta quedarte sin voz. El rock, para sus seguidores, es vida, libertad, pasión, ideología, amor, y muchas más cosas que no caben del todo en las palabras que usaríamos para describirlas. Hoy, 13 de julio, celebramos el día mundial del rock. Pon tu canción favorita, súbele el volumen al reproductor, y ¡a bailar!

La celebración de este día se da con motivo del Live Aid, un concierto que se realizó en 1985 de forma simultánea en varios países como Inglaterra, EE.UU. Australia y Rusia. Este evento lo realizó el compositor Bob Geldof con el objetivo de recaudar dinero para mitigar la hambruna en Somalia y Etiopía, y reunió a grupos como Queen, U2, Dire Straits, Black Sabbath, Led Zeppelin, Judas Priest, The Who e intérpretes como Mick Jagger, Tina Turner, Eric Clapton, Phil Collins y Paul McCartney.

Sin lugar a dudas, Rock al Parque es nuestro mayor referente de festivales de este género en la ciudad. Fervientemente, lo esperábamos cada año por él, nos programábamos, escogíamos los artistas que queremos ver, nos poníamos la pinta roquera, hacíamos la fila, y corríamos a los escenarios como nunca. Para Giovanna Chamorro, gerente (e) de música de Idartes, “los festivales al parque son un ejercicio de cultura ciudadana y de respeto por la diversidad. Son plataformas de visibilización de las y los músicos bogotanos, y además son espacios que permiten el diálogo de la ciudad con el mundo, pues a la capital llegan diferentes referentes de muchas estéticas sonoras, lo que es fundamental para el desarrollo cultural de la ciudad”.

Linda Criollo, es fiel testigo de este tipo de plataformas e intercambios culturales, ella vive y respira rock desde su cargo como productora del Festival Grito Rock. Para ella “Bogotá es el epicentro del rock en el país. Esto ha permitido que se articulen procesos nacionales e internacionales gracias a que aquí existe uno de los festivales más importantes de Latinoamérica como lo es Rock al Parque. Este género hace parte de las vidas de los ciudadanos y genera recuerdos e intercambios culturales extraordinarios”.

Ahora que atravesamos esta pandemia la música ha sido un catalizador de sentimientos, pues con ella hemos salido de la rutina virtual, recordando y acercándonos a esa otra vivencia, donde el rock era esencial para el encuentro. Estábamos acostumbrados a ir a conciertos de pequeño y gran formato, a escuchar a nuestra banda favorita, tomar algo y ‘parchar’ por Bogotá. Y esa dinámica, tal vez, es la que permite que el rock no muera, como dice Giovanni Patiño, integrante de la agrupación Perros sin Raza de Bosa, “pese a la incursión de diferentes géneros musicales, el rock es un ejercicio artístico y cultural muy fuerte, y a nivel de las localidades se ven procesos de bandas emergentes que evidencian la fuerte corriente roquera de la ciudad”.

El rock, como otros géneros, nos hace sentir una conexión indescriptible con cada acorde, con cada golpe de la baqueta en la batería, con cada “hola Bogotá” que dicen los y las cantantes al iniciar un concierto.

Hoy, que todavía no podemos volver a eventos masivos, recordemos esos conciertos a los que fuimos, a esas versiones de Rock al Parque con Fito, Angra, Apocalyptica, Skatalites, Andrés Calamaro, Café Tacvba, entre otros, vivamos el rock a través de las expresiones culturales de los creadores de Bogotá, y piensa para ti ¿qué es el rock?