La Fábrica de Licores de Antioquia informó que, en colaboración con Rentas, la Policía Nacional y la Fiscalía, se han incautado cerca de 26.000 botellas de licor adulterado en lo que va del año en el departamento. Esta problemática, que persiste desde hace años, no solo representa un riesgo para la salud pública, sino que también es una prioridad para la entidad, por lo que han optado por articular esfuerzos con las autoridades y promover la educación entre los consumidores para combatir este flagelo.
Julián Mauricio Burgos Niño, coordinador operativo y administrativo de la Subsecretaría de Ingresos de Antioquia, destacó la relevancia de la capacitación a actores estratégicos, como una de las claves para lograr los altos niveles de incautación.
“Además de las actividades de control, inspección y vigilancia, llevamos a cabo acciones preventivas mediante la capacitación a nuestros aliados estratégicos para que puedan identificar productos adulterados en el mercado. También sensibilizamos a comerciantes, estudiantes y a la ciudadanía en general sobre los riesgos legales y, sobre todo, los peligros para la salud y la vida que implica el consumo de licor adulterado”, señaló Burgos Niño.
Con la llegada de las fiestas de fin de año, un periodo en el que se registra un aumento en el consumo de licores, la Fábrica de Licores de Antioquia se comprometió a fortalecer sus medidas para frenar esta problemática. No solo buscan proteger la salud de los consumidores, sino también salvaguardar los ingresos de la entidad, que en su mayoría son destinados a financiar proyectos de salud y educación en el departamento.